Pone uno la tele tras las elecciones y todos sonríen. Todos se declaran ganadores. La prensa nos dará unos titulares muy pragmáticos que son siempre engaños porque se centran en el número de escaños y eso siempre es una interpretación que trascribe con los ojos de la Ley D’Hont las voluntades populares que se cuentan con número de votos.
Gracias a Dios, tenemos Internet y podemos ir a ver los datos. Aunque ha habido elecciones en dos comunidades autónomas me voy a centrar en Andalucía.
He cogido los datos hace un momento de la web oficial y, comparando con las anteriores elecciones autonómicas – por comparar peras con peras - me salen estos datos:
Esto es lo que dicen los números. Lo que leeremos mañana en la prensa (puede que a estas horas se pueda ya leer en las webs) no dejaran de ser interpretaciones más o menos mal intencionadas.
Pero como el artículo si no me quedaría muy corto voy a hacer mi interpretación, que para eso he abierto yo el blog.
Total que el Sr. Arenas ha perdido unos 170.000 votos, casi un 10%, y como ya se ha presentado unas cuantas veces, debería dimitir. Los partidarios dirán que son la fuerza más votada, que lo son, que es la primera vez que son la fuerza más votada de Andalucía, que también, pero ha perdido apoyo popular y eso estando las cosas como están, con todo el viento a favor, no ha sido capaz de obtener su objetivo que era gobernar y transformar Andalucía.
El Sr. Griñán ha perdido del orden de 660.00 votos, un 30% más o menos. Es un descalabro como un castillo, se lea como se lea, debería dimitir. Aquí argumentarán que han frenado la caída, que han parado las hordas de la derecha y tal y tal. Que las fuerzas de izquierda son mayoritarias y podrían gobernar, cierto. Pero los ciudadanos no han dado su apoyo para que sea él quien lidere estos nuevos tiempos sino que más bien expresan una voluntad de cambio. El relevo es bueno.
El Sr. Valderas ha subido más de 115.000 votos lo que supone para su partido un aumento por encima del 35%. Esto es mucho subir y su peso en el futuro de Andalucía será muy importante. Pero tampoco ha ganado. Solo son la tercera fuerza en número de votos con más o menos un tercio de los apoyos de sus rivales mayoritarios. De su sensatez dependerá ahora la gobernabilidad de Andalucía, porque con su peso deberían poder influir en la orientación del Gobierno pero no determinarlo de forma absoluta, porque son, repito, los terceros.
El resto de partidos no han conseguido representación. Unos están en camino ascendente como UPyD y otros deberían plantearse su propia existencia como el Partido Andalucista. Al resto recordar que no es excusa apelar solo al voto útil. El voto útil solo se produce si no hay otra propuesta que enganche.
La otra opción que ha subido es la abstención, que ha subido un 10%, y ya alcanza el 37,77% de los votos posibles. Esto también es para estudiar.
Ya si eso mañana escribo algo de Asturias.
