jueves, 19 de marzo de 2009

Mal de muchos

Hace un par de días alguien le afeaba a Luis Crandell su constante crítica al funcionamiento de los servicios públicos en general y de los funcionarios en particular.

Estoy de acuerdo con él en que debemos ser exigentes con la empresa pública porque funciona con el dinero de todos y además, como ya he dicho en alguna otra ocasión, la crítica es un camino de mejora.

Pero el mal funcionamiento no es exclusivo de los servicios y empleados públicos. De hecho está muy generalizado en los servicios bancarios, aunque creo que es un mal endémico en el sector servicios español.

El maltrato al cliente del montón, a los pudientes supongo que será otra cosa, es común en las oficinas bancarias que conozco. No están al servicio al cliente sino que el cliente tiene que adaptarse a las condiciones del servicio. Y luego se preguntan porqué huimos de este maltrato personalizado y nos vamos a la banca por internet.

Lo ilustraré con un ejemplo. Ayer mismo fui a retirar dinero en un cajero de una consolidada entidad financiera. La banda magnética estaba averiada y no me quedó otra que entrar en la oficina para solicitar asistencia.

Había tres mesas a la vista con sendos empleados cada uno centrado en su terminal de ordenador y sin clientes. Me dirijo a uno al azar. Se pone con lo mío y suena el teléfono, simultáneamente en todo el local. ¿Quién coge el teléfono? Pues como no podía ser de otra manera el único empleado que está atendiendo a una persona. Deja lo mío y se pone a hacer la gestión de la persona que le llama por teléfono. Como no tenía otro cosa que hacer conté el tiempo que tardó en atender telefónicamente a su interlocutor: 12 minutos. Por supuesto los otros empleados no levantaron la vista de su ordenador.

No me gusta mucho discutir, soy más de actuar y de cerrar la cuenta en este caso, pero cuando colgó le dije que había sido un tanto descortés dejar de atenderme para hacer caso a otra persona. Su respuesta me consoló: “era más importante”.

Curiosamente el lema de esta entidad es HABLAMOS. Se les olvidad decir que por teléfono y si al operario le pareces importante.

2 comentarios:

M@k, el Buscaimposibles dijo...

Creo que yo habría amenazado con retirar mis fondos.

PJ dijo...

Los retiré, creo que saldrá reflejado en la prensa en los próximos días.
No creo que puedan resistir un golpe así sin la ayuda del banco de España.